Una obra de arte en la provincia de Teruel que el agua, el viento y el tiempo han ido modelando, dando forma a cañones y barrancos espectaculares.
Conjuntos urbanos, monumentales yacimientos arqueológicos, escenas de arte rupestre que conviven con fósiles, bosques, viñas y huertos. Carrascas, pinos y sabinas frecuentados por jabalíes y pequeños mamíferos. En el bosque de Tamariz, ánades reales, somormujo lavanco y garzas y, en las vegas de los ríos, zorros y tejones.
Si se accede por el oeste te reciben las Cuencas Mineras, Montalbán y el tradicional barrio de Peñarroyas. En Alcaine recorres toda la historia humana desde hace seis mil años en La Cañada de Marco, y en Albalate del Arzobispo, más arte prehistórico en los abrigos de Los Estrechos I y II que, junto a los caprichos de la naturaleza, deja escenas asombrosas.
Los centros de interpretación guían nuestros pasos para llevarnos a Ariño y descubrirnos el rastro de las huellas de dinosaurios, o la tierra ibérica del Parque representada por Oliete donde una torre de catorce metros de altura, la mejor conservada de esa época y varios poblados, nos permiten hacernos una idea de cómo vivían.
Encontramos poblados de cultura ibérica pero también restos visigodos, musulmanes y una necrópolis medieval frente al santuario de la Virgen de Arcos.