Aragón con una extensión superior a la de países como Dinamarca, Holanda o Suiza, está situada en un radio de 300 km. de grandes ciudades como Madrid, Barcelona, Bilbao, Valencia, Burdeos y Toulouse, donde viven más de 25 millones de consumidores y con acceso a un mercado potencial de 25.240 millones de euros. La Comunidad Autónoma de Aragón atraviesa un largo periodo de gran estabilidad, tanto desde el punto de vista económico como social y político. La economía viene evolucionando de forma favorable, en particular si además consideramos la debilidad internacional más cercana. De este modo, ha venido creciendo por encima del promedio español y de la zona euro. Por sectores económicos, la construcción muestra el mayor dinamismo, seguido de los servicios y de la industria. Este buen comportamiento se ha reflejado en la situación del mercado de trabajo en la región. Aragón es hoy una de las Comunidades Autónomas con menor tasa de desempleo, junto con La Rioja y Navarra. Su tasa de desempleo es la mitad de la media española. Sus buenas infraestructuras de transporte por carretera y ferroviario, que están mejorando sustancialmente en los últimos años, junto con la existencia de una mano de obra altamente cualificada, son importantes valores que se suman a los factores de desarrollo anteriormente relacionados. La ampliación de nuevas rutas por parte del renovado aeropuerto de Zaragoza viene a potenciar nuestras comunicaciones.

Aragón está aprovechando al máximo todos estos potenciales para mantener el crecimiento económico y basar su dinamismo en la innovación, la investigación y el conocimiento.

De este modo, potentes iniciativas como el Parque Tecnológico Walqa en Huesca, las Plataformas Logísticas de Zaragoza (PLAZA) y de Teruel (PLATEA) han seguido a proyectos más consolidados como los desarrollados en el sector turístico de la nieve en Huesca y Teruel por ARAMON, en el sector agroalimentario con las Denominaciones de Origen en aceite, jamón, fruta y ternasco. Apuestas como ExpoZaragoza 2008 pueden acabar de situarnos en este mundo cada vez más abierto.

En una economía globalizada, la competitividad de sus empresas pasa por el fortalecimiento de las relaciones comerciales con el exterior. Aragón debe continuar siendo un lugar de oportunidades donde invertir, y seguir aprovechando una situación estratégica privilegiada para desarrollar excelentes relaciones internacionales.