Zaragoza  (Comarca de D.C. Zaragoza)

Según datos arqueológicos, el origen de Zaragoza estuvo entre los años 19 al 15 a. de C., en que nació con el privilegio de colonia inmune, y el nombre de Cesaraugusta en recuerdo de su fundador, César Augusto. Fue creada siguiendo el modelo de planta rectangular con dos vías principales -el kardus y el decumanus-, que determinaban el trazado urbanístico de la ciudad. Los ejes principales de aquella villa romana pueden seguirse en la actualidad, recorriendo la línea que va desde la calle Mayor a la calle Manifestación y a la calle don Jaime I, respectivamente.

Por aquel entonces, Zaragoza contaba con una fuerte muralla, cloacas, baños públicos, teatro y foro. En el siglo IV la población estaba profundamente cristianizada. En el año 380 se celebró el I Concilio de Zaragoza, en el 472 fue ocupada por un ejército godo al mando del conde Gauterico. No obstante, este hecho influyó poco en la estructura urbanística.

Ocio en Zaragoza

El Casco Histórico es el núcleo del ocio de la ciudad. Dentro del perímetro delimitado por el Coso encontramos variedad de ofertas hosteleras. Plazas como la de Santa Marta, la de San Pedro Nolasco o la de Sas se encuentran cubiertas con terrazas. El tapeo se abre paso en El Tubo, un conjunto de callejuelas estrechas situadas en el Casco Viejo que desembocan en la Plaza de España y donde se encuentra la mayor aglomeración de bares de tapeo de la ciudad. Allí conviven establecimientos populares y restaurantes como Bal d´Onsera, la primera estrella Michelin de la capital aragonesa. Dentro de El Tubo el café cantante El Plata mantiene con solera el cabaret en Zaragoza con 3 sesiones diarias y también la vanguardia con las sesiones de discoteca más punteras. También dentro del Casco Histórico se encuentra la mayor aglomeración de discobares y pubs de la ciudad y la zona más popular entre los jóvenes durante las noches de los fines de semana en torno a la calle del Temple y adyacentes. Cabe destacar también dentro del ocio nocturno la cercana discoteca Oasis.

En el centro también se pueden encontrar calles plagadas de terrazas como el Paseo de la Independencia y adyacentes como la calle Cádiz, en esta zona se encuentran los cines que han persistido en el centro de la ciudad así como una amplia oferta de salas de baile, tabernas, pubs y restaurantes. El Casino de Zaragoza también se encuentra en este entorno. La zona de Azoque y la Plaza de Salamero alberga multitud de salas de baile que suelen ser frecuentados por personas de mediana edad.

La Magdalena es hoy en día la zona más alternativa e intercultural de la ciudad. Allí se pueden encontrar teterías árabes, bares con música reggae, galerías de arte y comercios alternativos, ambiente aragonesista o centros sociales con una intensa programación cultural y musical.

El entorno de San Miguel se ha convertido en otro foco del tapeo y de la restauración zaragozana con numerosas terrazas. Los alrededores de la Universidad destacan también como zona de picoteo y cervezas. Bares como «Montesol» y «London» son bien conocidos por sus tapas y bocadillos así como las terrazas de la plaza de San Francisco y los numerosos restaurantes cercanos. En la zona de Bretón también se puede disfrutar bailando por la noche.

Los parques de la ciudad albergan terrazas que en época estival invitan a disfrutar del aire libre. Destaca el auditorio del Rincón de Goya, dentro del Parque Grande.

A raíz de la Expo 2008 y de la mano del plan de riberas, el río Ebro ha pasado a ser otro escenario del ocio y disfrute zaragozano. A los lados de su cauce en su paso por la ciudad se han abierto multitud de terrazas, entre las que destaca «Las Playas» en el Parque Metropolitano del Agua. También se habilitaron numerosos espacios en los que se puede practicar gran variedad de actividades, desde paseos en barca con origen en el azud de Vadorrey, pasando por el descenso del canal de aguas bravas, el golf, el baño en las playas fluviales, la gastronomía de los restaurantes ribereños, las vistas aéreas del río desde el telecabina, el alquiler de bicicletas de paseo o la asistencia con los niños a teatros infantiles.

Por último cabe citar que los centros comerciales abiertos en los últimos años también ofertan espacios de ocio con cines, restaurantes, boleras y parques infantiles entre otros. Cabe destacar Plaza Imperial, Puerto Venecia, GranCasa, Augusta, Aragonia o los Porches del Audiorama.