Situada en uno de los afluentes del río Baliera, Bonansa es un importante cruce de caminos y un buen lugar para los que aman el senderismo y el deporte en bicicleta.
Desde su casco urbano se pueden contemplar unas magníficas vistas, el pueblo está situado en una ladera cerca del alto de su mismo nombre.
De actividad tradicionalmente agrícola y ganadera, su carácter urbano es típicamente montañés. Destaca, en la plaza, un caserón solariego del siglo XVI.
En general, el conjunto arquitectónico que conforman las casas del pueblo, sus eras y sus huertos, le otorgan una gran belleza. Cerca de la plaza, se encuentran la fuente y la Iglesia Parroquial dedicada a Santa Coloma. También cuenta con otros numerosos lugares de interés como las ermitas románicas de San Aventín, San Roque y San Salvador. En la plaza mayor, está la casa de Navarri, una de las más antiguas del pueblo y , además, podrás realizar interesantes excursiones campestres a los pueblos del municipio como Bibiles, Gabarret, Espollá, Cirés, Buira y Torre de Buira.
El privilegiado clima suave de montaña y abundantes praderas han hecho que Bonansa resistiese al éxodo rural y se mantuviese vivo. Hoy en día sus habitantes compaginan las dos actividades principales, y importante sector ganadero, con un ya consolidado sector turístico, Bonansa triplica su población en las épocas estivales.
A parte de alojamientos hoteleros y de turismo rural, la localidad cuenta con instalaciones deportivas, piscina, restaurante-bar, tele-centro y locales para actividades.
Fiestas: Romerías a la Virgen de la Mola y a Santa Llusia, 15 y 16 de agosto.
