Interesante recorrido por el entorno del pueblo de Yebra de Basa, tanto por la belleza de su paisaje, como por el importante y numeroso patrimonio religioso que se visita. Partimos del núcleo urbano por una pista asfaltada en dirección norte, hasta llegar a un desvío que indica las cuevas de Santa Orosia. Dejamos el asfalto y pasamos a una pista de tierra. A los pocos metros aparece la primera de las ermitas que vamos a ver durante el recorrido. Se trata de la ermita del Augusto. Seguimos el camino que pasa a su izquierda y enseguida cruzamos el barranco de Santa Orosia. Al otro lado del cauce, la pista se convierte en una senda ascendente. Al principio la subida es suave pero, poco a poco, el desnivel se hace más fuerte, entre terrenos de margas azules. Llegamos a una segunda ermita, la de las Escoroniellas. Continuamos ascendiendo y tras unos 700 metros, aproximadamente, nos situamos en la ermita de las Arrodillas. Varias lazadas nos hacen ganar altura, hasta cruzar nuevamente el barranco. Tras una curva pronunciada a nuestra izquierda, llegamos a las ermitas de San Cornello y de la Cueva, situadas junto a la cascada del Chorro. Este rincón forma un entorno de extraordinaria belleza. Aprovechamos una estrecha cornisa y, cruzamos el barranco por debajo de la cascada. Pasamos por dos nuevas ermitas, la de San Blas y poco después, la de Santa Bárbara. A partir de esta última, la senda sigue en cuesta moderada hasta divisar el último de los santuarios, que anuncia el final de la subida. Se trata de la ermita de la Cruz o del Zoque. Desde la capilla, sale una pista dirección norte. Tras 1 km por ella, llegamos al santuario de Santa Orosia. Desde este punto, volvemos al pueblo de Yebra de Basa por el mismo camino que el de subida.
